Cómo hacerle «counter» a la pereza

Ars Vitae, Mente positiva

Estás cómodamente sentado en tu sofá o en tu súper sillón reventado después de un día de… no hacer nada… Es más, no solo te sientes con cansancio sino que el aburrimiento te invade terriblemente por no tener una motivación real en ese momento de tu vida. Sientes que la vida se te escapa otra vez pero tampoco te importa ya tanto…

¡ESPABILA! Sabes muy bien que no estás siendo proactivo y, sin necesidad de entender el porqué, estás sumiéndote de nuevo en ese círculo vicioso de «ya cada vez las cosas me importan menos».

Esas pocas ganas de hacer cosas influencia las actividades que tienes que hacer para ese día, pero no únicamente eso, también son resultado de las acciones que tomaste en el pasado. Es decir, serás perezoso porque lo eres ahora y lo eres ahora porque lo fuiste antes.

Llegaste a crear una tendencia que al hacerte sentir de poca utilidad te está aislando poco a poco. Te está enajenando de lo que supone un verdadero vivir, en pocas palabras, te estás deprimiendo. No estamos hablando aquí de una depresión de causa genética sino más bien de los hábitos poco higiénicos mentalmente en los que caemos de manera diaria.

Y justo de eso se trata: de caer. Bueno, más bien de levantarse a pesar de las caídas.

Siendo leales al título y para no enrollarnos más, expondremos aquí una poderosa y sencillísima forma de romper ese mal hábito. Te animo a que cuentes también con un especialista puesto que las causas de tu «pereza-depresión» podrían tener muy malas consecuencias si no se tratan tempranamente y se ignoran como es habitual. Como si solamente importara la parte física y no la mental importara, «como si un ordenador/computador funcionara solo por su hardware y no tuviera un software«.

Sé responsable de tus actos, tus decisiones diarias marcan tu vida. Aunque parezca que no tienen gran influencia, todas las decisiones que hagas «pintan como un cuadro» marcando tu destino real.

No olvides que tu pereza podría deberse también a un mal descanso y a una mala alimentación que quitan tus ganas de trabajar. Si no tienes el combustible adecuado es normal que no puedas hacer nada. Échale un vistazo a «Descanso«, «Nutrición» y «Deporte«.

Fórmula mágica que tiene su efectividad únicamente si la realizas al leerla la primera vez (¡AHORA!):

«Levántate ahora mismo de donde estés, lávate la cara, bebe algo de agua, come si tienes hambre, estira un poco, respira hondo, haz tu cama y ya estás listo para emprender problemas más complejos». ¿Te has dado cuenta de lo que he hecho?

Empieza con algo tan sencillo como levantarte nada más te des cuenta que estás haciendo el vago y una vez te levantes haz inmediatamente otra acción sencilla como lavarse la cara o hacer la cama y ya tendrás el día a tus pies.

Mediante una minúsucla decisión has cambiado tu día, tu semana, tu mes, tu vida y la vida de las personas que te rodean. Estás haciendo un mundo mejor, ¡enhorabuena!

¡Ánimo, guerreros, estáis hechos para cosas que todavía ni podéis imaginar!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *